Una no es,
quien dicen los demás que es.
Nunca fui espiga en agosto,
ni copo de nieve en invierno.
No corrí como el viento,
tras las escasas nubes del cielo,
ni me hice ola por estar junto al mar.
Fuí buena amante,
aunque fui más amor,
y por no ser, ni fuí quien,
ni cómo dijeron los demás,
fue mucho más sencillo,
perderme en mí misma,
jugando con mis fantasmas.
Tal vez me tacharon de prepotente,
por no pedir nada.
Impía por perdonarlo casi todo,
que no todo.
Tozuda por no olvidar,
aunque me olvidaran.
Una no es nada más que lo que es,
capaz de todo lo malo y algo de lo bueno.
Por impulsiva yendo a pecho descubierto,
suelen romperme la cara,
-me la han roto muchas veces-
que no el alma, esa no está en nuestra mano.
Soy entre muchos difícil,
extrañamente compleja incluso para mí.
Ciertamente corriente,
en nuestra común vulgaridad,
aunque muchos se empeñen en decirme,
"Te conozco"
sin conocerse a ellos mismos.
quien dicen los demás que es.
Nunca fui espiga en agosto,
ni copo de nieve en invierno.
No corrí como el viento,
tras las escasas nubes del cielo,
ni me hice ola por estar junto al mar.
Fuí buena amante,
aunque fui más amor,
y por no ser, ni fuí quien,
ni cómo dijeron los demás,
fue mucho más sencillo,
perderme en mí misma,
jugando con mis fantasmas.
Tal vez me tacharon de prepotente,
por no pedir nada.
Impía por perdonarlo casi todo,
que no todo.
Tozuda por no olvidar,
aunque me olvidaran.
Una no es nada más que lo que es,
capaz de todo lo malo y algo de lo bueno.
Por impulsiva yendo a pecho descubierto,
suelen romperme la cara,
-me la han roto muchas veces-
que no el alma, esa no está en nuestra mano.
Soy entre muchos difícil,
extrañamente compleja incluso para mí.
Ciertamente corriente,
en nuestra común vulgaridad,
aunque muchos se empeñen en decirme,
"Te conozco"
sin conocerse a ellos mismos.
imagen: google