en cualquier calle,
de cualquier sentimiento.
No he mirado hacia atrás al dejarme ir,
he querido crecer,
saber hasta dónde era capaz de levantarme,
sonarme los mocos,
dejar de llorar y encontrar el camino
de vuelta a mí misma.
Muchas veces me he dejado caer
en brazos de mi compasión,
logrando mi desprecio.
He doblado una rodilla -nunca las dos-
he caído tantas veces, como me he levantado
y al final, he regresado a buscarme
allí donde me dejé el cansancio
de ser quien y cómo soy.
Me he rendido a mi realidad,
y ahora,
camino tranquila, a mi paso,
mi mano en mi propia mano,
es tiempo de mar de trigos,
ya no hay siembra...
imagen: Google
de cualquier sentimiento.
No he mirado hacia atrás al dejarme ir,
he querido crecer,
saber hasta dónde era capaz de levantarme,
sonarme los mocos,
dejar de llorar y encontrar el camino
de vuelta a mí misma.
Muchas veces me he dejado caer
en brazos de mi compasión,
logrando mi desprecio.
He doblado una rodilla -nunca las dos-
he caído tantas veces, como me he levantado
y al final, he regresado a buscarme
allí donde me dejé el cansancio
de ser quien y cómo soy.
Me he rendido a mi realidad,
y ahora,
camino tranquila, a mi paso,
mi mano en mi propia mano,
es tiempo de mar de trigos,
ya no hay siembra...
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