jueves, 10 de julio de 2014

TERCIOPELO

Corre junto al viento,
este poema,
acariciando tu cuello,
bordeando tu cintura,
rozando tu boca.
Hijo de mi memoria de ti,
piel contra mi piel,
roce de seda,
terciopelo nocturno,
sobre la espalda de la noche.


imagen: Parole sussurrate

martes, 8 de julio de 2014

POEMA SOBRE TU PIEL


Quiero escribirte un poema,
sin letras, 
a besos,
a caricias,
a mordiscos
a ponerte contra la pared,
de mis deseos,
hasta hacerlos tuyos,
quiero desnudarte de miedos,
prejuicios,
esto sí, aquello...¡También!
El primer verso
a pura lengua
desde tu hombro
hasta tu cuello.
Lenta la letra,
sin rima ni coma,
comiéndote, el segundo,
respirándote al oído,
alientos en minúscula,
bajando en tobogán
hasta tus pechos,
columpio de mayúsculas,
tentaciones manuales,
donde el aire succiona
el delirio de las exclamaciones.
Y un espacio,
entre tus senos y tu ombligo,
para recuperar la tinta de mi lengua.
Me lleno en el pozo de tu vientre,
mientras mi musa,
cierra los ojos al placer,
de un desnudo, donde el cuerpo,
se torna arco tensado,
para lanzar un verso,
de acero y fuego, en el bajo vientre
donde rubrico este poema
escrito a una lengua,
declamado a dúo,
sobre el escenario de la pasión,
en esta habitación, con vistas a un poema
escrito sobre tu piel.


imagen: Il Rifugio dell'Anima

lunes, 7 de julio de 2014

TODO


De repente mi nombre no me dice nada,
me llena de un silencio opaco y denso.
Trato de saber, si alguna vez,
me dijeron algo,
las letras que lo componen.
De repente me canso de ser yo,
de cargar conmigo todo el tiempo,
de no descansar de mí misma,
de llevarme a cuestas a ninguna parte.
Y miro al pobre que discute
su ubicación con otro pobre,
los miro casi con indiferencia,
porque el día no me importa,
y su discusión me suena a
galgos y podencos.
Hoy pude morirme
pero no tuve tiempo
de esperar a la parca,
y eso se necesita.
Hoy pude ser,
malvada,
ladrona,
prostituta,
embustera,
piadosa,
celosa,
despechada,
asesina,
dueña de un burdel,
o una anciana.
Pude haber sido,
con la indiferencia.
de a quien nada le importa,
una drogadicta adicta
a cualquier cosa.
Porque hay días que agonizan
que se mueren solos,
sin esperarte para morirse.
Quizá por eso,
mi nombre
-ese que me pusieron-,
no me dice nada,
porque no me llama la voz,
que al llamarme por mi nombre,
me lo dice TODO.


imagen: mathieu-vladimir