domingo, 28 de junio de 2015

TRAICIÓN

No me dejó dormir contigo, la noche.
Celosa, tatuó en mi cuerpo,
con el gélido pincel, de la cola de una estrella,
su imagen, en lugar de la tuya.
Me dio a oler su perfume de mujer,
clavándome en los ojos, el acero de su deseo,
poniendo su nombre entre mis labios.
Me dejé llevar por su belleza.
La aurora, me encontró, tirada en la arena,
llorando sola, avergonzada por mi traición.


imagen: wordpress

VIVIR DESESPERADAMENTE

Quiero tragarte a ti y al mundo,
antes de que el mundo acabe conmigo,
tenerte como se tiene el aire,
dando vueltas por todo mi cuerpo,
jugando con mis pulmones,
batiendo mi sangre sobre el corazón,
de mi ángel dormido.
No quiero besarte, quiero beberte
y si eres toda tú un veneno...
¡Que me lleve con una sonrisa, la parca,
al cielo o al infierno!



imagen: Orlando S.

jueves, 25 de junio de 2015

TE DIRIA

Te diría lo que callo por vergüenza,
de no ser porque, mi vergüenza,
sigue dormida, sobre tu pecho.



imagen: Google

domingo, 21 de junio de 2015

MUJER

Mujer,
oscuro velo que tapa mis carencias,
no te alejes, de mi acera,
que me han dejado sola.
Danza en mi el ritmo,
de esa música que tan sólo tu sientes.
Abrázame sin miedo, fuertemente,
encierrame entre tus piernas,
hazme presa de tus caderas.
Dame con tus labios,
la llave que abre la cima de tu vientre,
sabré acariciar las curvas,
de tus emociones.
Pasto de mis sueños,
almohada de mis deseos.
Sin ti, se paraliza mi costado,
la torpe mirada se cuelga
de una estrella sin luz,
en un cielo carente de luna.
Mujer,
hija de la noche,
deja que te desnude mientras
admiro el cincel que te dio forma
de Venus.
Prende tus brazos alrededor de mi cuello,
hagamos el amor sobre el lecho del mar,
con la música de las redes
y la luz, de las barcas lejanas.


imagen: Sylvie Lancrenon

TEMOR



Esta soledad,
este saberme sola,
aún constándome que ahí fuera,
me quieren o me aman,
tergiversa mi hoy,
como los fuegos artificiales,
modifican con sus luces el cielo,
aún sin hacerlo más de un minuto.
Si fuese guitarra,
andaría sin cuerdas, rotas todas,
antes de iniciar el instante,
de ser música.
Esta compañía,
lapa de mi roca vivencial,
no me deja un instante,
tal vez temiendo,
que me alcance la felicidad
y la abandone.


imagen: Alain Hanel

sábado, 20 de junio de 2015

BAILAR

Bailar, 
sentirme lejos de todo,
atravesar el espacio
que me habita,
alejarme incluso del placer
de hacer el amor,
Danzar
imaginándome espora,
hoja en busca del vacío,
gota de lluvia, alejada de la nube madre,
caricia frustrada,
cama sin deshacer,
letra sin palabra.
Bailar,
lejos de mi misma,
donde el espacio me brinde,
una pista redonda,
una orquesta mental
y mi alma suavemente
me diga...¿Bailas?


imagen: Richard Calmes

POEMA EN LA PIEL

A punta de lengua,
sobre el papel de tu piel,
escribo un poema,
sin letras,
sin palabras,
vacío de adjetivos,
huérfano de metáforas.
A punta de lengua,
para borrar mis errores...
Tus labios.


imagen: Albert Watson

VOYEUR

Saltas el mar,
caes en la arena de mi cuerpo,
remolino húmedo, crestas de plata.
En ti, esquirlas doradas, besos rotos,
en las rocas de tus pechos.
Veleros entrando en puerto
mientras el mundo quieto,
voyeur solitario,
jadea y suda.

imagen: trishindmitry-trishin

ESCAPARATE

Cuando tengo tu mano,
no siento dolor, ni miedo,
ni esa angustia que casi siempre, 
viene acompañándome.
Al regreso de haberte ido,
a ese "ninguna parte" donde te vas,
cuando me dejas, sin querer mirarme,
todo cambia, incluso este corazón mío,
se para un poco, queriendo acariciarte.
Cuando soy tu mirada, y tú la mía,
no hay un vestido que le cuadre más,
ni quede más hermoso,
que tu cuerpo y tu persona,
en mi pobre escaparate.


imagen: Gerhard Merzeder

NO IMPORTA

No importa si la lluvia cae,
hace sol y tiemblan las persianas,
batidas por el viento.
Sólo te veo a ti, desnuda,
en éste íntimo rectángulo,
donde las sábanas se pierden,
bajo tu piel.


imagen: Peeter Coulson
 —

DE RETALES

A trozos, 
retales mal zurcidos, 
a caricias perdidas,
de cara a la pared del fracaso. 
Juegos que dejan de serlo,
cuando el sentido da paso al sentimiento.
A trozos te deshaces,
y con toscos zurcidos te hacen saco,
donde meten todo cuanto cabe,
apretando cuando ya no hay espacio.
Por no saber ser mía, fui de todos,
de ella,
de aquella, que obviamente
no recordará ni mi cara, ni mi nombre.
Cuanto sentí, lo que me hice y me hicieron
me encaminaron frente a la puerta,
en la que hoy me ubico.
Soy lo que la gente,
mis sentimientos
y mis manos han hecho conmigo,
sin duda alguna,
mi propia responsabilidad.
Un ayer diferente, -que poco justifica-
una historia de todos, menos mía,
que escribieron en la debilidad,
de mi afán por ser amada.
Sobre mi piel, las mochilas donde
dormían sus penas, -que permití-
echaran a las mías de su lugar,
aunque no ocupaban mucho espacio.
A través de las rejas de sus asuntos,
vi morir los míos,
sin ser capaz de enterrarlos.
A trozos dejé mis sueños
por el camino de la impotencia
de una realidad que no lo era.
Hoy soy, gracias a todo
una piedra que rueda desnuda,
sin otro afán que llegar a encontrarme,
compartiendo desde dentro y fuera
los sueños ajenos, atándome con fuerza las zapatillas
para iniciar el peregrinaje
de encontrar, en primer lugar, los míos.


imagen: peter cuison

Y APARECIÓ LA MUJER EN LA TIERRA DEL SOL

Dormía el agua,
entre sus sábanas traslúcidas,
los renacuajos corrían a esconderse
bajo los pétalos de los nenúfares.
El bambú se retorcía en los brazos
del viento y los sauces llorones
inclinaban sus ramas para verla.
Ella, desnuda,
cortó el agua con su cuerpo,
dejando a las cañas envenenadas
de envidia.
La bruma matinal rondó su piel
e hizo un albornoz para tapar sus senos,
pero amante de la belleza,
el aire, la desnudó nuevamente
mientras las hojas de los árboles,
aplaudían su perfección.
El rocío avisó al sol de la aparición
de aquel ser extraño,
que había fascinado todo su entorno,
e incluso las flores se ofrecían,
como adorno para su piel, con tal de rozarla.
Se compuso el astro,
se alzó del horizonte en un amanecer
imposible de describir y al verla enrojeció el cielo,
preso del fuego de su amor por ella.
Desde ese día perdido en los tiempos,
no hay amanecer que no la busque,
ni cielo rojo que no describa
el momento en que la ve y ella,le sonríe
contenta de su amor y enamorada.


imagen: Google

SOLEDADES

 No te pido que me sostengas,
puedo hacerlo sola.
Se hacer casi todo sin nadie,
menos el amor, aunque alguna vez,
creí amar, estando...en absoluta soledad.

imagen: Peter Lindbergh

VOLAR

Volar, 
alcanzar la nube y atravesarla,
percatándonos de que no existe.
Sabernos fantasía, seres irreales,
sin márgenes para movernos
de un lado a otro.
Volar y caer al colchón soñando,
dando el golpe con el cuerpo
de la imaginación.
Planear escaleras abajo,
frustrados aviones de carne y hueso.

imagen: slideshare

MI ESCONDITE

Me voy al cine,
a pensarte, en esa oscuridad
de engaños apacibles.
Te pensaré
como si estuvieras a mi lado,
queriendo no soltar tu mano,
aún sabiendo lo sola que está la mía,
haciendo ver que te comento al oído,
mientras te beso el cuello, y sonrío.
Me voy a ver si me engaño otra vez,
si me olvido de que no estás,
aunque estuviste, ya hace tanto tiempo,
y la pantalla me sirve de pañuelo
para esconderme de mi,
de esta tristeza tonta que me irrita.
No finjo nada ¿para qué?
entro y salgo igual o con otra historia
aburrida, compleja o loca,
no importa demasiado.
Solo voy al cine,
a esconderme de mí,
como siempre.


imagen: google

ENTRA



Entra sin llamar,
hace tiempo que mi puerta no se abría,
no esperaba a nadie.
No tengo nada especial
para enamorarte, la experiencia,
no es un regalo,
es una carga pesada,
que dobla el alma haciéndola temerosa.
Entra, para darte,
apenas tengo mis brazos,
si con paciencia escarbas en mí,
tal vez -sólo tal vez-
sorprendentemente, encuentres algo más.
No te prometo lo que no tengo,
reconozco sin rubor,
la incredulidad que te quiere en mi.
Deja el dintel de la puerta,
pasa a mi penumbra, tal vez la ilumines,
entra sin miedo en mi corazón,
yo temblaré por las dos.

imagen: google

TUS LABIOS



Tus labios entreabiertos,
llamando a los míos
para que sueñen juntos
bañándose a la luz de esa luna
que ilumina tu deseo
y pone al descubierto,
mi imaginación ardiendo
en tu boca.
 imagen: google

TOZUDEZ

Hay cosas que dan miedo
como enfrentarse
a una enfermedad inesperada, 
porque sólo enfermaban los otros,
no los tuyos.
O pensar que te abandonarán
los que dicen amarte, aún sabiendo
lo mucho que te aman.
Da miedo vivir de manera mecánica,
y otro tanto asumir que la vida está loca
jugando con ella en su locura.
Ser consciente de que no eres la mejor,
ni la más inteligente,
que el tiempo te ha hecho
casi invisible a los ojos ajenos
y cuesta tanto que te sirvan un café
como que te lo cobren.
Hacer y no hacerlo,
sentir que te miran preguntándose
¿Que es lo que tienes tú, que ellos no tengan?
y lo único que no tienes es esa pregunta,
porque sabes que careces de mucho,
y no te sobra nada.
Hay cosas que no se comprenden,
esas que complicamos pese a la vida,
que no lo es tanto como pretendemos.
Da miedo ser como somos
y tozudamente, seguirlo siendo.


imagen:Google
 

MIENTRAS PASEO.

Camino y pienso,
en un poema que quiere venir,
y no acaba de llegar.
Espero el autobús de la imaginación,
porque las musas, nunca me dieron palabras,
sencillamente me amaron o yo las amé,
como mujeres que fueron y son.
Espero un gesto de alguno de esos turistas,
cámara en ristre, o en palo largo,
nuevo caza mariposas, o caza imágenes,
pero es difícil captarlo entre las hileras,
de japoneses,italianos, franceses y alemanes,
ordenados como manzanas en escaparate,
siguiendo a una señora con paraguas verde,
mano amarilla, o un cartel con un O.K.
guías con cara de fastidio,
intentando reunir a sus rebaños,
a golpe de altavoz.
Camino y pienso,
en el gorro que no me he puesto,
el sol que me achicharra,
la sombra que siempre está
en el lado contrario.
En la primera fuente, me mojo el pelo,
mientras una ristra de ciclistas
se flagela haciendo turismo a golpe de pedal.
¿En qué pensaba, antes de ver pasar a toda esta gente?
Creo que en un poema,
en esas palabras con música,
aunque físicamente sin ella,
fonemas, letras...imágenes.
Huele a pan recién hecho,
a pastas dulces,
olores lejanos,ahora tan próximos.
¡Hum, que bien huele, eso que no puedo comer!
¿Que hora es? -me pregunta un muchacho-
Un segundo antes de decírsela,
sé que acelerará el paso, tenga o no prisa,
lo hace, aligera como si el tiempo
estuviese a punto de fallecer y él
quisiera estar, para darle el último adiós.
La Monumental, el arte de la muerte,
por suerte ya no hay toros,
que me recuerden a los circos romanos,
ahora es un museo para turistas curiosos,
de la brutalidad humana.
¿Por qué seremos tan sanguinarios?
Acabo de cruzar en rojo,
una niña me mira con reproche.
¡Eso era!
Quería hacer un poema sobre tus ojos,
y ella, con los suyos, me lo ha dejado claro.
No necesito escribirlo, ni él quiere que lo escriba,
preciso tenerte cerca, para que me enseñes,
que signos lleva la palabra "Amor"
en el alfabeto de tu mirada.




imagen: mabel escribano

INDOLORA



Una ráfaga de viento,
la nostalgia que nos llama,
y todo vuelve a ser, palabra,
sonido o música que se escucha
en el corazón que la promueve.
No es cierta la tristeza,
es tu triste mirar hacia el pasado,
ése que ha dejado de ser tuyo,
para no ser de nadie.
Ya apenas queda aire del ayer,
ése que movió tu vida, ya no está,
ahora cantas el soliloquio,
de tu blues, a palo seco.
Y duermes el dolor sobre la nube
que se marcha, pese a tus manos
intentando frenarla.
Es hora de decir adiós,
respirando el presente
aunque sólo sea,
para vivir un poco mas, a poder ser,
en una nostalgia del hoy
prácticamente indolora.


imagen: Google

COLLAR DE AUSENCIAS

Aferrado a mi cuello 
un collar de noches sin ti,
lleno de ausencias,
prisioneras de tu cuerpo sin el mío,
perseguidoras de tus caricias,
anhelantes de tus palabras.
Collar de noches negras, en blanco,
contando estrellas muertas.
El alma encadenada a tu imagen,
como las hojas al árbol,
prendida de la rama de tus palabras,
del color de tus gestos,
del fruto de tu semilla,
que no es más, que este amor,
luchando por salir de mi cuerpo,
para entrar en el tuyo.
Perlas caídas, de noches en tu ausencia,
revolcada en tu imagen, gritando tu nombre,
temblando mi cuerpo,
en mi memoria, el tuyo desnudo
ardiendo en este amor de añoranzas,
mutuamente compartidas.

imagen: Google

ADOLESCENCIA TARDIA

Caer en ti, en tu risa,
dejarme llevar por esa adolescente,
que creí dormida en el limbo,
sin ejercer como tal, falta de tiempo,
y sin recursos para serlo.
Ruborizarme a esta edad,
donde los años han dejado surcos,
marcado huellas,
y el dolor y la decepción,
han sido más dueños de mi casa
que de la suya.
Caer en ti,
como se cae en el mar en agosto,
jadeando de calor, sudando vida,
ansiando mojarse desde la piel,
hasta los huesos,
queriendo ser, ermitaño de mar,
en busca de una cáscara de molusco,
donde esconder su rubor y su vergüenza.
Caer en un gesto impropio,
sabiendo que no es propio de una,
aunque,sinceramente,
no me importa nada, que no lo sea.


imagen: google

DONDE ANIDES

Duerme,
yo guardaré tus sueños,
aunque no sean los míos.
Seré el árbol donde anides,
no importa la rama, ni el viento.
Bajo mi copa,
estarán seguras tus fantasías,
Duerme,
mis manos apagarán las estrellas
para que sus luces no te despierten.
duerme, vida mía, duerme.


imagen: Google

SER O NO SER

No tengo a gala ser mujer
-aunque lo soy-
Ni la tendría de haber sido hombre,
Tengo a gala ser persona,
y normalmente -aunque no siempre-
buena persona.






imagen: google

CENIZAS

Regresar,
dar la vuelta,
intentar retroceder el camino andado.
Recordar si era la primera o la segunda
aquella calle, donde el error me dejó exhausta,
sin pared donde apoyarme,
sin puerta a la que llamar.
Intentar darme la mano a mí misma
para levantarme del mal sueño,
tal vez de la realidad que creí soñada.
Volver sin mirar el reloj
sabiendo que el tiempo no retrocede
que el hecho, ya está grabado,
y nada hay que lo cambie.
¿Qué hacer entonces?
Dejarme llevar dócil río,
acariciar la arcilla de las orillas,
despedirme de los juncos,
ser agua que pasa sin retorno,
o escribir sobre el cieno,
que estuve a tu lado,
que fui la calle donde tomaste,
un respiro de mi boca,
mientras aguantaba el llanto,
para no mojar tu cara,
con mis errores y mis penas.
Quedarme quieta entre tus brazos,
queriendo ser olvido,
no regresar a mi propia Sodoma
siguiendo el camino con tu mano o sin ella,
olvidando que quise regresar,
para apagar el fuego de mi vida,
cuando tan sólo, quedaban en el
las cenizas.

imagen: google

TIEMPO Y ESPACIO


Aquel día, 
cruzaste mi camino,
me sonreíste y entonces,
te amé un segundo,
tan sólo uno.
No tenías espacio para más,
ni yo, tiempo para menos.



imagen: Caesar Lima

TU SUEÑO, MIO

Soñar contigo,
sin amaneceres ni estrellas,
dejar que duerma la luna,
olvidarme del mar,
sólo soñar contigo.
Acariciar tu no despertar,
en las ventanas de tus párpados,
apenas rozar tu cara, con mi aliento,
negarme el placer de besarte,
para no desvelarme,
y sólo mirándote en ése sueño,
donde tranquila sonríes,
meterme bajo las sábanas,
de tus suspiros,
para verte dormir e intentar,
que me deje tu sueño,
soñar contigo.


imagen: Ruth Berhard

OLVIDO

Rodeada de gente,
llueven soledades caminando
entre el sol y el tráfico,
sin una frase dirigida a mi,
sin una palabra dejada caer
junto a tu oído,
envuelta en una sonrisa cómplice.
Olvidé el paraguas del consuelo
en casa.
¡ Soy un desastre !


imagen: Calrus

AMIGAS

Tal vez, darte la mano,
no decir nada y escucharte,
caminar a tu lado, sintiéndote cercana,
sin apretar el paso, haciendo del tuyo el mío.
Ser tu amiga
en el silencio que precises,
reír contigo, llegada la hora de la risa,
mirando para otro lado sin dejar de estar,
cuando te doble la pena,
consciente de que, tu llanto es sólo tuyo,
que el dolor difícilmente se comparte,
aunque el mío, -sin duda- te acompañe por dentro,
y mi brazo te sujete, cuanto mi fuerza pueda.


Imagen: Google

POR SEPARADO

Aunque lo creímos,
nunca fue nuestro el mundo, si acaso, 
lo fueron las horas,
en los que el tiempo se paró,
mientras nos besábamos,
y en el beso,
el mundo siguió flotando,
sin ti,
sin mi.
Todavía flota en la memoria de ese sol,
que nos calienta,
a ti y a mi, por separado. 


Image; Julie Anabelle

SOLO SE MUERE UNA VEZ

Aquello de morirse, no le había dolido nada. 
Ciertamente no recordaba cómo había sido, pero que estaba muerta, era evidente. Tenía frente a si su cadáver, a sus hijos y amigos con caras largas y a dos o tres personas muy amadas, que no estaban para atender a nadie, ni tan siquiera a sus restos. 
Sin sorpresas se dio cuenta de que no le habían hecho ningún caso -claro que nunca se lo hicieron- Siempre dijo que no quería flores...y toma ramos y más ramos, que no quería himnos, y no paraba de sonar algo así como el hilo musical en clásico y con ruidos metálicos de fondo.
A ella lo que le gustaba era el Jazz, o el blues...eso un blues llorado por Etta James o Bessie Smith.
En fin ni muerta podía tener  lo que había pedido.
Vio con espanto ir de llorona a Josephine, que de no haber muerto (seguía sin recordar cómo) habría sido capaz de envenenarla con uno de sus lamentables escritos.
Realmente eran letales, regalar un libro de Josephine era jugar a envenenar rápidamente con las intragables historias.
Tenía éxito la mala pécora, aunque siempre escribía el mismo tema, con diferentes situaciones geográficas. La gente compraba sus libros y ella alardeaba de ello con una soberana, lógica e inaguantable prepotencia, si bien, seguía envidiando a quienes con menos ventas, eran tratados como mejores escritores.
Siempre la misma historia:
Chica buena se enamora de hombre muy hombre (cosa normal, no va a ser un hombre muy mujer, salvo que fuese gay) pero no, ella siempre tan hetero, decía que chica buena...y entonces sale la chica mala malísima, pero libidinosa, descarada y además, un bellezón imposible de describir.
Cambiando de Chicago a Honolulú o poniendo el triángulo en el siglo XVIII, reescribía la misma historia o hacía copia y pega en el ordenador.
Vio entrar cariacontecido a su editor.
Secándose el sudor -siempre sudaba cuando perdía dinero-
No le extrañó verle con cara de pena. Había dejado sin terminar, dos novelas y a cuenta de las mismas, cuatro mil euros, que se había gastado en un viaje, aunque no recordaba a dónde, si bien, tenía claro que no iba sola.
Ahora sí que le picó la curiosidad. Si no iba sola, ¿quién iba con ella? y donde estaba su acompañante?
Recorrió todo el tanatorio buscando un cadáver conocido. No, con un señor seguro que no. A ella le iban las mujeres. Pero todas las difuntas eran demasiado ancianas, más o menos como ella, y ella no se habría ido de viaje con una vieja achacosa.
Vio a su amiga Lupe, la más cotilla del mundo.
Sabía lo que todavía no había sucedido, pero si ella lo decía y no había pasado...pasaba.
Se acercó a preguntarla, intentó tocarla, pero que va, ella estaba en una etapa incorpórea, llena de preguntas y ahora sí, muy molesta por no poderlas hacer, con certeza Lupe, sabría decirle, quien demonios la acompañó a dilapidar los cuatro mil euros.
Y fue entonces, cuando todos se movilizaron para llevar su cuerpo al crematorio cuando la vio.
Aferrada a Pablo, casi atornillada a él , mirándolo como la chica buena y boba de las novelas de Josephine.
¡La muy cabrona que me dejó plantada en el avión! grito sin que nadie la oyese.
Ahora recordó la dureza del sillón, el cinturón de seguridad...
Y aquellos golpes en la cara, la voz gritando.
-Cristina, por favor, tranquilícese...ha sido la anestesia, debe de ser usted alérgica.
nos ha dado un susto de muerte.
-Anestesia? - Ahora no entendía nada-
-¿Dónde estoy?
-En el dentista, le estábamos introduciendo la pieza del molar y se ha puesto usted a decir cosas muy extrañas. Incluso la hemos tenido que atar al sillón, no fuese a lastimarse.
Al cabo de una hora, salió a la calle, con la cara entumecida, sin notar la boca.
Morirse había sido indoloro, y algo divertido.
Lo del dentista era otra cosa, y por si acaso, cuando se le pasara el efecto de acartonamiento, pensaba hablar seriamente con Pablo, ella no estaba para escenitas tipo Josephine.



imagen: Google


DONDE SE OLVIDE EL ALMA

Clavar la daga hasta la empuñadura
en el alma, dejándola sangrar,
que el caño del amor se seque, 
y luego, enterrarla en la tierra yerma,
sin pasto ni hierba,
sin poner un nombre,
ni una flor,
ni una palabra,
dejarla en el olvido,
sin llanto,
sin nostalgia.


imagen: 'Under the Skin

EL NUEVO ORDEN

Aquella mañana,
el mar había perdido el agua,
tan sólo le quedaba una lágrima de sal, 
sobre la espuma de una ola, hecha imagen.
Los peces volaban como nubes
en un cielo rojo de infierno,
las sirenas se arrastraban
hacia las fuentes de los hombres
con estrellas en las manos.
Se apagó el sol, dormido sobre la cumbre del Fujisan,
la nieve fundida se agarró a la falda de la tierra,
mientras los pájaros buscaban anidar
en la sombra de la luna.
Aquella mañana, me marché
tomé el abecedario, sacándolo de paseo,
frente a la indiferencia de la gente,
que no amaba a los animales de letras
ni jamás les acariciaba,
por miedo a contagiarse de su imaginación,
cosa prohibida por el nuevo orden.



imagen: Fotograma de Orwell

VACACIONES

Me encantaría estar de vacaciones por tu cuerpo,
abrir la ventana de tu boca,
provocar la corriente de tu cuello
alborotar la fronda de tus pechos,
bajar la persiana de tu pelo.
Me gustaría viajar, tu piel a besos.


imagen: Google

NO ESTAS AQUÍ...

No estás aquí y me cuesta que te vayas,
que vengas y marches
que me tengas y me dejes,
aunque no me dejes,
porque sigas amándome.
No estás y tu mano busca la mía,
y la mía trata de atraparla,
pero las sombras se escapan,
saltan paredes, se diluyen en el agua.
Espero el autobús sin ti,
mientras me sacudo la arena de la playa,
si estuvieras, -que no estás,lo se-
sería más amena la espera,
te reirías de mí y yo contigo,
como esos dos que tienen miedo
de dejar de mirarse.
Un solo asiento me vale,
bueno, ya voy camino de casa,
se me acaba este hoy,
no estás aquí, aún no viniste
ya me da miedo que te vayas.
mabel escribano
d.r.
imagen: Mark Segal

viernes, 5 de junio de 2015

QUIETA

Quedarme quieta mirándote,
castigarme sin dar un paso hacia ti,
sabiendo que puedo darlo,
que quieres que lo de.
Y alargo el tiempo, sin tiempo,
me digo que no hay que esperar,
y aún así, me quedo estática,
saboreando ese extraño amor,
que nunca vi en otra.
Alargo los instantes,
sujetos a las bridas de una voluntad
que se me quiebra poco a poco,
Y rozo tu piel con miedo a que desaparezcas,
a que no seas mas que un holograma
de mis pobres deseos.
Me quedo inmóvil,
y son tus brazos los que me rodean,
tu voz la que me alienta, mientras tus dedos,
aprisionan un llanto que no controlo
porque mis lágrimas no sabían
que yo, para no asustarte,
por miedo a que desaparecieras,
me había quedado quieta.


imagen: Google

jueves, 4 de junio de 2015

LA ESPERA.


De vez en cuando, me solía acercar a una cafetería muy antigua.
Me gustaban sus mesas de mármol, el camarero de toda la vida, y sobre todo, que tenían la costumbre francesa -el dueño había sido camarero en París- de servir junto al humeante y buen café, un pequeño vaso de agua.
Aquel día en lugar de ir a media mañana, lo hice por la tarde.
Un magnífico coche paró frente a nosotros, el camarero, voló para ayudar a una elegante y preciosa anciana ciega.
Casi sin precisar ayuda, tomó asiento en el sillón de mimbre de la terraza, junto a un rincón lleno de flores.
-Qué mujer más bonita -le comenté al camarero- Debió de ser una joven muy hermosa, hoy en día rondaría los ochenta y aún lo era.
El me respondió que era una clienta fija, desde antes incluso de la guerra.
Durante la misma, había estado refugiada con unos parientes en Suiza.
Tenía una historia muy bonita, pero que como era un cliente...No estaría bien contarla.
Tardé cuatro días de insistencia y ruegos, de verla llegar a la misma hora y partir al atardecer, tan sonriente como a la llegada.
Aquella preciosa anciana, esperaba a su amor, todos los días desde su regreso, una vez finalizadas ambas guerras, la civil y la mundial.
Ciega de nacimiento. Su familia de muy buena posición hizo lo indecible para que la recuperase, pero fue inútil.
Creció junto a un muchacho de una familia amiga vecina de la Bonanova. Un barrio elegante de Barcelona.
Se enamoraron siendo adolescentes y sus padres lo recibieron con alegría.
Al llegar la guerra el muchacho fue alistado.
Hicieron un pacto, al finalizar la contienda, ganase quien ganase, se encontrarían aquí, en el mismo bar donde declararon lo mucho que se querían.
-Y ahí la tiene, todos los días viene y al oscurecer, la pasan a recoger, siempre arreglada y hermosa, sin un mal gesto.
-¡Qué pena,-exclamé- seguramente el murió en la guerra!
-No, no murió -me comentó bajando mucho la voz-
-Hace veinte años, otro coche paró después del suyo. Un chofer bajó una silla de ruedas con un hombre de unos sesenta años. No tenía piernas. Seguramente la guerra.
-Se la quedó mirando desde este mismo lugar donde está usted.
Sin hablar, por señas me pidió un café., al llevárselo, me di cuenta de que lloraba.
Nunca había visto un hombre llorar así. En silencio, como si no pasara nada.
La miraba y lloraba.
Al cabo de una hora, hizo una seña y se fue. Nunca más volvió
-Y ustedes no la dijeron nada a ella?
-Y qué la íbamos a decir? No estábamos seguros de nada, y además ¿quiénes éramos nosotros para entrometernos.
-Al menos todavía tiene ilusión. Ella le espera, siempre le está esperando.
Me levanté de la mesa con ganas de...no sé de qué.
Porque no sabía si aquello era bueno o malo, pero me dije a mi misma, lo que siempre me digo, aunque no siempre lo hago.
Ante la duda...Abstente Mabel, abstente.

imagen: Google

lunes, 1 de junio de 2015

AMANECER

No amanece,
se niega a despertar el día,
las sombras del árbol viejo, 
apenas marcan su imagen.
La luz se ha dormido sobre tu piel,
mi mirada la tapa con cuidado.
Despierta la calle
la somnolencia de los adoquines,
mientras los plataneros sacuden su polen,
y el guarda del parking -ése que siempre está completo-
estornuda de manera escandalosa,
mientras en el jardín bostezan los claveles,
y retozan dos o tres perros.
Huele a café,
a caricia recién hecha.
Te observo,
desnuda y dormida,
llamas a los pinceles
que ni tengo ni domino
pero trato de dibujarte con la palabra,
de manos del sentimiento.
No amanece, pero tú,tienes el poder
de hacerme amanecer, aún estando dormida.



imagen: Sebastian Cviq

LA HABITACIÓN DORMIDA

Cuando el abrazo se hace silencio,
escrito en la mirada el mensaje.
Cuando el cuerpo habla,
diciendo lo que los labios callan.
Cuando tus manos y las mías,
son el eje de la caricia,
que ignora quién o cuando la inició,
suspirando por entrar la una en la otra.
La vibración se apodera del corto espacio
entre los cuerpos, entendiendo que,
no hay sonidos mas hermosos
que los suspiros del corazón y el alma,
escapándose del cuerpo por la boca.
No hay movimiento más sutil, que el de las caderas,
ejerciendo de pértigas
de un lado al otro del cielo o el infierno
si existe un centímetro de distancia de la una a la otra.
Suma de placeres
enmudeciendo lo ya dicho sin decirlo,
miradas que todo lo abarcan,
pese a estar entornadas las persianas de los ojos.
Y la piel fusionada entre sudor y escalofrío,
dejándose llevar por el instinto liberado de su cadena,
por el sentimiento traducido a delirio.
Boca a boca se fusiona el grito en el camino,
se alarga la espiral, volando al unísono hacia la misma nube,
única y sola en el cielo de la habitación dormida.



imagen: Ricardo Celma 

POR TUS OJOS


Si he de entrar en ti,
ábreme la puerta de tu mirada
por tus ojos, no siento rubor
al desnudarme.


imagen: Red

SIN ESTAR CONTIGO

Tenerte con las manos vacías,
acariciarte con la mente,
pasear con tu sombra,
siendo sombra de mi propio camino.
Llevar tu olor como perfume,
la memoria de tus besos,
como fugaz compañía,
y hacer camino, sin importar hacia dónde,
aún recorriendo las mismas calles,
saludando a la misma gente,
sin estar aquí, sin estar allí,
sin estar contigo.



imagen: Peter Lindbergh