A cuerpo desnudo te camino,
nos miran las nubes rotas,
mientras el aire silba,
esa canción sin nombre.
Mis ojos se pierden sobre tu piel,
y en mis labios se hacen presentes los desiertos,
deseando el oásis de los tuyos.
Tan cerca la piel de la piel,
a un centímetro del encuentro,
se perpetúa el deseo.
Baten los pulmones los remos del ansia,
buscando un descanso del oleaje.
En las calas de tus brazos.
araña mi espalda el arrecife de tu pasión,
dejándome desnuda y dormida,
sobre la arena blanca de tu respiración.
Cogidas de las manos,
caminamos el cielo de los cirros,
visillos blancos,
sin cristales en sus ventanas,
con los que imitarnos,
haciendo el amor.
mientras el aire silba,
esa canción sin nombre.
Mis ojos se pierden sobre tu piel,
y en mis labios se hacen presentes los desiertos,
deseando el oásis de los tuyos.
Tan cerca la piel de la piel,
a un centímetro del encuentro,
se perpetúa el deseo.
Baten los pulmones los remos del ansia,
buscando un descanso del oleaje.
En las calas de tus brazos.
araña mi espalda el arrecife de tu pasión,
dejándome desnuda y dormida,
sobre la arena blanca de tu respiración.
Cogidas de las manos,
caminamos el cielo de los cirros,
visillos blancos,
sin cristales en sus ventanas,
con los que imitarnos,
haciendo el amor.
imagen: k.Murakamy
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