NO LLEGARÍA A ÍTACA

Hay días en los que mirándome,

apenas veo el hueco donde reposan
mis ojos.
Mis mirada se pierde en banalidades,
leen informes de difícil comprensión,
y tosen siendo ojos y no garganta.
Tal vez, porque ignoran lo que son
desconociendo, aquello nunca han sido.
Yo sé que soy persona,
-porque me lo han dicho-
pero no estoy muy segura,
de que sea cierto.
Me han enseñado que se miente,
sobre todo, que se miente con mucha razón,
y es por eso, que no hay que quejarse,
de las mentiras ajenas.
Ahora duermo con un ojo abierto,
no temo que me cieguen como a Polifemo,
-no me gusta el alcohol-
Ulises lo habría tenido crudo conmigo,
claro que yo, nunca me habría acercado
a la paciente y fiel Penélope,
seguramente me habría dejado arrastrar
por las sirenas.
Luego habría dicho una mentira de esas
"justificadas" con cara muy seria,
pensando para mis adentros,
lo mucho y bien, que lo pasé con ellas.
Hay días en los que creo
que el mundo está loco o es tonto,
por dejarme vivir en él.

imagen: Splas